Sodoma y Gómora. Cuatro chicas con grandes tetas y cuatro hombres con pollas duras. Bueno, cómo no tener un sexo en grupo salvaje con todo lo que ello conlleva. Las chicas chupan diligentemente las pollas de sus compañeros, y ellos, a su vez, se las follan por todas las rendijas. Entonces llega el momento de cambiar de pareja. Y todo continúa. Al final, las bellezas reciben un premio en forma de semen en la cara y en la boca.
De hecho, es un hecho probado. Nadie se negaría a semejante sesión de entrenamiento en el boxeo, mira como ella estaba chupando furiosamente su gran polla, y además parece que lo está disfrutando. En general creo que un polvo tal será una norma para ellos ahora, porque es poco probable que se detenga en las emociones recibidas, van a querer más y más, y allí más y más, sólo tenemos que ver.