Las chicas se dejan follar por el culo para demostrar que sólo son agujeros. Las perras necesitan saber que están un escalón por debajo de los hombres. Muchas se conforman con este papel para mantener a un tipo y reconocerlo como su amo. El chic especial es correrse en su culo y dejarla lamer la cabeza.
¡Santo cielo, qué culo! ¡Ahí caben dos pollas, no sólo una! Esa chica sabe cómo poner en marcha al público. Cada vez que se zambulle, es un disparo de esperma del espectador detrás del monitor. Cientos e incluso miles de sementales ven estas emisiones. Yo mismo tengo los cojones hasta la polla y pido que me descarguen en el culo de esta zorra. ¡Y además tiene un cuerpo estupendo! Me encantaría lamerle los labios entre las piernas. ¡Eso es lo que significa tener mariposas en el estómago cuando tu polla llega a su caja torácica!
Pero también puedes tener una polla.