Toda hija tiene que aprender a tener sexo. Y es bueno cuando los padres son comprensivos al respecto. Su padre intentó enseñarle por la vía fácil, pero su madre dijo que ella sabía mejor cómo chupar y contonearse. Decidieron no tocarle el culo todavía, pero le enseñaron buenos modales en el coño y en la boca. La madre resultó ser una hábil maestra y enseñó a su hija la técnica correcta. ¡Qué familia tan maravillosa!
Mamá no les regaló mucho. Pero los hermanos no se lamentaron por mucho tiempo. La asiática aprovechó el momento y engatusó a su hermana para que convenciera a su hermano de hacer un trío. Teniendo en cuenta que la asiática tiene un físico menudo, parece un elefante y un alce contra la gran polla de su hermano.
Me gustaría poder hacer eso).